
2º Domingo de Cuaresma ciclo B (Mc 9,2-10)
Jesús se deja ver como Dios y como Hombre verdadero para que en la prueba del Calvario recordemos la gloria del Tabor y nos mantengamos firmes en la fe. En sus infinitos detalles de amor, Dios permite que recibamos “adelantos de cielo”, pero para disfrutarlos es necesario subir con Jesús, escuchar su Palabra y contemplarlo, porque desde arriba todo se ve con la Luz de Dios, y se baja con fuerza para recorrer el exigente camino de la Vida, pasando por el desierto, siguiendo la ruta del Tabor al Calvario, para llegar a la Resurrección.
Pero… ¿Cómo se hace para subir con Jesús al Tabor? Lo primero es seguirlo y escucharlo, Dios se transfigura y se muestra personalmente. La oración eleva el alma y en cada eucaristía se nos da un adelanto de la gloria, al terminar la misa somos enviados a ir en paz, a compartir nuestra experiencia de Fe.
ORACIÓN
Transfigúrate Señor, dame un adelanto de cielo,
que suba para llenarme y me transforme contigo,
que te escuche en la alegría y en la hora de la cruz,
para bajar a mostrarte y el que me vea te vea,
que puedan brillar mis obras, porque todas sean tuyas,
quédate en mi corazón y asómate por mi sonrisa,
y en el Tabor del Sagrario, donde tú bajas y esperas,
elévame cada día y transfigúrame contigo.
